Grandiosa saga salida de la mente de uno de los mejores guionistas de la industria, que vivía un momento de gloria que le llevó a guionizar varias de las historias más importantes del cómic americano de superhéroes. En el caso que nos ocupa Wolfman era el máximo responsable de la colección Fantastic Four y los números que comprenden esta aventura vieron la luz entre mediados de 1979 y principios de 1980: 11 episodios –concretamente el #204 al 214 USA-.
De la mano del dibujante Keith Pollard, que se encargaría de los tres primeros episodios, el cuarteto se enfrentaría a un Skrull para ayudar a una reina venida de otro planeta en busca de ayuda, ya que su raza se encuentra al borde de la extinción ante el ataque de los beligerantes metamorfos. Xandar y sus ordenadores vivientes –germen de lo que serían los Cuerpos Nova, cuyo final se narró hace poco en Aniquilación- es el destino al que parten tres de los cuatro fantásticos, ya que Johnny decide quedarse en casa y retomar sus estudios.
A partir de aquí todo es una constante carrera por la supervivencia en un más difícil todavía: Mr. Fantástico, La Mujer Invisible y La Cosa son hechos prisioneros, capturados y sentenciados a muerte ¡y ejecutados! La Antorcha vivirá una aventura de la mano de Sal Buscema (Thor de Walter Simonson; Vengadores: guerra kree-skrull) –los dos siguientes números- de la que saldrá gracias a la ayuda de Spider-Man; antes de reunirse con su familia en el planeta Xandar, donde las cosas empiezan a complicarse.
Los Nuevos Campeones, con Nova a la cabeza, han llegado para defender la raza asediada. Entre ellos viaja la Esfinge, un ser inmortal de gran poder que busca una manera de acabar con su existencia. El conocimiento hallado le permite acceder a la divinidad y nublado su juicio, no se le ocurre otra cosa que partir hacia la tierra para destruirla. La única esperanza de la humanidad radica en un plan desesperado de Reed Richards: ¡encontrar a Galactus y pedirle ayuda!
El gran John Byrne (Capitán América, Iron Man: Armor Wars II) se encarga de los seis episodios restantes, en una primera toma de contacto antes de convertirse tiempo después en el autor completo de la serie, situando su etapa en la colección como la mejor de toda su historia sólo por detrás de los mejores números del dúo Lee – Kirby (X-Men, Spider-Man). A partir de aquí los números ya son espectaculares: batallas sin cuartel, grandes luchas cósmicas y el destino de la Tierra en la balanza. Y con sus protagonistas muriéndose poco a poco, por si todo lo anterior no era suficiente.
Wolfman no sólo maneja los resortes de la acción y el suspense de forma magistral, sino que sabe llevar sin esfuerzo una acción separada en varios frentes y con multitud de personajes. En estas páginas, aparte del regreso de Galactus, los skrulls o un villano como El monóculo, vieron su primera aparición personajes míticos de la colección como el robot HERBIE o Terrax el indómito.
Una gran historia recopilada en un tomo de tapa dura perteneciente al Coleccionable que a Panini tan buenos resultados le está dando. Y con este estilo de aventuras no es de extrañar lo más mínimo.
Otra etapa interesante en este blog de La Primera Familia es la guionizada por Mark Millar y dibujada por Bryan Hitch: justo aquí.
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