Una de las políticas más importantes que desarrolló Joe
Quesada en su cargo de Editor en Jefe de Marvel fue atraer al mundo de los
cómics a talentos que desarrollaban su labor en otros medios como literatura,
cine o televisión. Del mundo de la televisión participaron en la editorial
guionistas de éxito como Straczynski (Babylon 5, Thor) o Damon Lindelof (Perdidos,
Ultimate Lobezno Vs Hulk).
En Abril de 2005 y a rebufo de lo que el guionista Brian Michel
Bendis venía haciendo en los Vengadores –desbancar el grupo, matar a varios de
sus miembros más conocidos y reformularlos al más puro estilo de la JLA de la
competencia- el guionista Allan Heinberg publicó el primer número de su serie
de 12 capítulos en los que se sacaba de la manga un nuevo grupo de superhéroes,
jóvenes todos ellos que iniciaban sus carreras de héroes, relacionados la
mayoría de ellos de un modo o de otro con los Vengadores más clásicos.
Como productor de televisión ha participado en series de
sobra conocidas como Sexo en Nueva York,
Las chicas Gilmore, The O.C. o Anotomía de Grey. En DC también desarrolló
un par de proyectos en la JLA y Wonder Woman, pero hasta ahora ha sido
incapaz de compaginar ambas labores profesionales, siendo los cómics los
mayores perjudicados con grandes retrasos que destrozaban las historias. Jóvenes Vengadores tampoco se libró de
ello y a mitad de su publicación tuvo que pasar de ser un cómic mensual a
bimestral. Pero lo peor fue que tras su finalización en el número 12 –junio de
2006- Heinberg abandonó la colección y esta fue cancelada a la espera del
retorno del guionista, hecho que tuvo lugar hace unos pocos meses en Estados
Unidos. Desde entonces los Jóvenes Vengadores han tenido apariciones
esporádicas, siempre envueltos en grandes eventos o como secundarios de
colecciones más importantes, pero no en forma de serie.
La historia se centra en una serie de personajes de creación
nueva que comienzan a ejercer como superhéroes. Su juventud y la similitud de
sus disfraces con los Vengadores hacen que Jessica Jones se interese como
periodista en ellos, llegando a conocerles. En los primeros seis números
Heinberg se centra en una gran historia de presentación de personajes que tiene
como invitados de excepción al Capitán América y a Iron Man, que tiene lugar en
las ruinas de la mansión de los Vengadores y que entrama viajes y paradojas
temporales.
Heinberg mezcla muy bien lo nuevo con lo viejo, realiza un
perfil adecuado de los nuevos jóvenes superpoderosos y sabe respetar y usar la
continuidad de forma adecuada. No teme arriesgarse con temas a priori más
adultos como el consumo de drogas o la homosexualidad de dos de sus miembros. Además
sitúa a sus protagonistas en pleno Universo Marvel, haciéndolos interactuar con
otros integrantes de dicho universo de una forma directa. La presentación es
espectacular y se ve muy favorecida por los lápices de Jim Cheung, un artista
británico que volvía a Marvel tras su paso en los años noventa –recuerdo unas
páginas suyas en Iron Man pre Héroes Reborn que empezaban a enseñar
algo bueno, si bien todavía andaba lejos del nivel actual-. Cheung sabe ser
espectacular, narrar y tiene cierto toque para las ilustraciones a toda página.
Su trabajo en esta serie lo sitúo como uno de los más prometedores artistas de
Marvel y ha ido trabajando aquí y allí en números sueltos de sus series
principales, así como portadista. Y es que Cheung, como la mayoría de
compañeros de profesión actuales, no es un dibujante muy rápido y necesita su
tiempo.
En los números 7 y 8 es Andrea DiVito (Aniquilación) el que se encarga del dibujo, en un breve interludio
donde el guionista sigue profundizando en los orígenes de sus diferentes
miembros. La vuelta de Cheung para los números finales traerá una espectacular
batalla en varios niveles que englobará al ejército Kree y Skrull, al
Superskrull, a los Nuevos Vengadores y a nuestros jóvenes protagonistas,
cogidos en medio sin saber muy bien porqué.
Hasta la vuelta de Heinberg a la serie, estos primeros
números quedan como algo novedoso, que ha calado muy bien entre el público –hoy
en día es muy difícil crear personajes nuevos y que estos se asienten- tanto
nuevo como veterano, sin duda por la hábil mezcla de espectaculares dibujos con
un guión bien trabajado donde podemos encontrar la típica angustia adolescente
aderezada con superpoderes y condimentada con dos ingredientes cada vez más
difíciles de hallar: la continuidad actual y la pasada. Una serie muy
entretenida y muy recomendable, que eleva mucho el nivel de la Marvel de Joe
Quesada.





Estoy de acuerdo, Young Avengers ha sido de lo mejor que ha sacado Marvel últimamente (por suerte ahora están sacando Avengers Children's Crusade).
ResponderEliminarTienes un muy buen blog, si te animas a visitar el mío ahí va el link: www.artbyarion.blogspot.com
Gracias, me pasaré por el tuyo.
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