Nuevas series: Camelot. Primeros capítulos

Decepcionante el estreno de la última producción de Starz, la cadena por cable norteamericana que nos ha traído Spartacuso la miniserie de Los pilares de la tierra. A medio camino entre una y otra, no tiene ni la originalidad ni el desfase de la primera ni la producción ni los medios de la segunda.

Basada en un reparto coral donde abundan los rostros conocidos, apuesta por la reformulación del mito artúrico, con todo aquello que ya conocemos: la espada en la roca, el niño inocente que descubre que es rey, las maquinaciones de Merlin o su rivalidad con su hermanastra Morgana. Sin embargo en sus comienzos la cosa parece apostar demasiado por el culebrón para adolescentes, quedándose en nada.

Pero si algo me ha llamado la atención ha sido sin duda el tremendo error de casting que tiene esta serie. Eva Green (Casino Royal, La brújula dorada, Franklyn) es guapísima y como tal se pasa todo el metraje semidesnuda o envuelta en ropas de lo más sugerentes pero es incapaz de aportar ese toque de maldad que necesita Morgana; Joseph Finnes (FlashForward) interpreta a un Merlin raro y demasiado pasado de vueltas, algo que no beneficia de por sí al actor. Pero sin duda lo peor ha sido la elección de Arturo, otro adolescente guapo más con cara de no enterarse de nada y con cero carisma. En papeles secundarios están actores conocidos como Claire Forlani o Philip Winchester, al que vimos hace poco en Fringe. Lo flagrante es que James Purefoy tenga una pequeña intervención en el inicio de esta temporada y se coma al resto del reparto prácticamente repitiendo su papel de Marco Antonio en Roma, la serie de la BBC y la HBO.

Si le sumamos que la dirección también peca de alardes que no vienen a cuento y que la acción se desarrolla a trompicones –muchas de las situaciones que tienen lugar ocurren porque sí, sin ningún tipo de explicación de por medio- y teniendo en cuenta que es Michael Hirst el productor y creador, responsable de las series The Tudors y The Borgias, la cosa no acaba de entenderse muy bien. De hecho, es decepcionante y aquellos que auguraron que podría rivalizar con la adaptación de Juego de tronos de la HBO no sabían de lo que hablaban.