
La cuarta temporada de Héroes ha contado con 19 episodios donde, si bien se ha podido apreciar el intento por parte de los responsables de superar todos aquellos defectos que la han condenado a la mediocridad, hay que admitir que han reincidido en muchos de los errores que se vienen repitiendo sistemáticamente desde que comenzaron su emisión hace ya varios años.

La inclusión de una trama central que conecte todos los capítulos y que esté mejor desarrollada ha ayudado mucho, pero al mismo tiempo se ve lastrada por la necesidad de repartir el protagonismo entre todos los seres poderosos que ya conocemos, muchos de los cuales ya han ganado lo suficiente en popularidad como para desenvolverse en sus propias aventuras secundarias. De esa forma, la incorporación al ya de por sí variado elenco actoral de Robert Knepper (Prison Break, Transporter III) dando pie a un nuevo antagonista que dirige una feria ambulante donde todos sus integrantes tienen habilidades especiales y viven como una familia, ha sido de lo mejor de esta temporada. Su deseo es atraer a todos aquellos con poderes que encuentra e integrarlos a la comunidad. Por supuesto, sus intereses personales irán más allá de los de sus semejantes y pronto se convertirá en una amenaza para todos los que le rodean. De esa forma, la mayoría de caras que ya conocíamos (Claire, Sylar, Hiro, Niki) acabarán pasando por el circo ambulante para contemplar lo que les ofrece. Lo que lastra de nuevo a la serie es la imposibilidad de concretar más en el papel de cada personaje: Peter sigue siendo un obsesionado cuyos lazos familiares ya se han utilizado demasiado –la relación con su madre y su hermano es demasiado caótica-; Sylar sigue saltando de un lado a otro de la línea que separa la villanía de la heroicidad: de asesino psicótico a héroe solitario; Hiro es una caricatura de lo que fue y sólo se usa como elemento cómico excepto en contadas ocasiones, cuyo papel entonces es el de deux ex machina; Claire y su padre Noah –que son los que más aparecen desde que se comenzó a emitir- centran demasiado el protagonismo y siempre dan vueltas sobre lo mismo: mentiras, pasados ocultos, visos de normalidad, ahora te perdono, ahora te protejo. Con lo que sí cumple es con la tradición de ofrecer una conclusión con puntos bastante discutibles, cuando no ridículos –eso de transportarlos a todos, ¿no era más fácil transportar sólo a uno?-.
La cancelación es algo que ha estado planeando sobre la serie en muchas ocasiones. La NBC no sabe muy bien qué hacer con ella, pese a la caída de audiencias. Y es que parece ser que el target al que le interesa esta serie es uno muy beneficioso para la cadena, de ahí que siga aguantando en la parrilla. El caso es que Héroes lleva ya cuatro temporadas –y cinco volúmenes, a consecuencia de la huelga de guionistas de hace unos años que obligó a dividir una de ellas en dos partes- creando expectativas y prometiendo mucho más de lo que ofrece. Pero ahí se mantiene. ¿Volverá para una quinta temporada? En el último capítulo visto parecía que sí. ¿Será la última, la definitiva?
Todo Héroes, aquí.
Me da por lo que has escrito que no voy a perder mucho el timpo viendola, vi los volumenes tres y cuatro y lo cierto es que no me gustaron.
ResponderEliminarEs más de lo mismo, si ya no te gustaron las anteriores pasa de esta sin dudarlo.
ResponderEliminarSobre todo con la cantidad de cosas por ver -y leer- que hay ahora mismo.