
Leterrier se deja de historias y hace aquello para lo que se le ha contratado: un espectáculo de acción y efectos especiales que resulta entretenido y cuya forma no deja entrever nada del desarrollo de los personajes o incluso de lo que está ocurriendo en realidad: todo pasa porque sí mientras vamos saltando de una escena de lucha a la siguiente. Pero eso es lo que promete y lo que ofrece, algo de agradecer hoy en día, al menos.

Si a un desarrollo lleno de diversión le añadimos unas cuantas caras conocidas de Hollywood para los papeles principales, tenemos la ensalada completa y condimentada: Liam Neeson como Zeus, Ralph Fiennes como Hades (Harry Potter; En tierra hostil), Jason Flemyng como Calibos (El curioso caso de Benjamin Button), Alexa Davalos como una desaprovechada Andrómeda (La niebla) y una guapísima desconocida en el papel de Io, Gemma Artenton. Sin mencionar pequeños papeles de Pete Postlethwaite o de Danny Houston (Wolverine), que también andan por ahí. Y me dejo para el final al nuevo héroe de acción americano y nuevo imán para superproducciones, un correcto Sam Worthington (Terminator Salvation, Avatar) que cumple con su físico.
Si a todo lo dicho se le añade alguna secuencia muy bien lograda por parte del director; apoyado firmemente en unos decorados y fondos muy bien realizados y en algunos momentos por los acordes de la partitura épica de Ramin Djawadi (que ha puesto música a películas como Iron Man o la serie de televisión Prison Break); la verdad es que algunas escenas hacen que aparezca incluso un poquito de emoción en el deslumbrado espectador. Para terminar, mencionar que hay algún que otro guiño a la versión antigua, siendo bastante gracioso cuando aparece el búho. En resumen: la definición de correcta película americana palomitera. Ni más ni menos.
¿merece la pena verse en cine?
ResponderEliminarBah, es una peli malilla, de ancefalograma plano, que se olvida tan fácilmente como el sabor de las palomitas que te comes en tu butaca.
ResponderEliminarSe podría decir que lo único que vale la pena es verla en el cine, por eso de los efectos especiales -y en 2D, que por ahí se puede leer que es una basura en 3D, por eso de que está convertida y no rodada en ese formato-.
Si de repente te apetece pasar un par de horas entretenidas sin pensar en nada más y no tienes nada mejor que ver en el cine -esto es casi imposible- pues adelante, pero yo no acabo de recomendarla.