sábado, 27 de abril de 2024

Los espíritus de los muertos de Edgar Allan Poe, de Richard Corben

 

La relación entre Edgar Allan Poe y Richard Corben viene de largo. Ya en la década de los setenta Corben dedicó buena parte de su trabajo a adaptar diferentes obras del autor de Las aventuras de Arthur Gordon Pym y ya en tiempos más recientes, cuando se encontraba trabajando para Marvel Comics dando su visión de algunos de los héroes de la editorial, encontró un hueco en su contrato para algunos trabajos más personales adaptando directamente al mundo de la viñeta relatos originales de Poe y Lovecraft (La guarida del horror). 

Lo mismo se puede decir de su etapa en Dark Horse. La editorial independiente no solo consiguió reimprimir las viejas historias de Corben en Creepy y Eerie –con no poco trabajo de restauración-, sino que publicó trabajos del artista en Hellboy junto a Mike Mignola (El hombre retorcido) o en la colección de Conan, todos ellos con éxito entre crítica y público. 

Página de Berenice

También tuvo espacio Corben para la creación propia, como Ragemoor o estos relatos que fue publicando en números independientes o dentro de la serie antológica Dark Horse Presents. En ellos Corben vuelve a asomarse a las páginas de Poe, muchas de ellas visitadas con anterioridad en más de una ocasión. Eso ofrece una nueva lectura a este tomo: la posibilidad de comparar cómo en hasta tres periodos diferentes de su vida artística un mismo autor puede plasmar un único relato de diferentes formas. Una diferencia fundamental es que ahora apuesta totalmente por el color, asistido por su hija Beth Corben Reed. 

El tomo está cargado de mil y una referencias a lo que le gusta a Corben, algo que para sus lectores resulta de lo más familiar. Sin ir más lejos, abre con el poema de Poe que da título al tomo recopilatorio para el que el propio Corben realizó portadas nuevas en sus dos ediciones de tapa blanda y dura –también contiene en su interior las portadas originales realizadas por Corben en la serie antológica antes mencionada o de los números que se publicaron de forma independiente-. 

Página de El hundimiento de la casa Usher

Si la forma en que Corben lleva a cabo la adaptación de un autor al que conoce tan bien como Poe ya es digna de mención –en muchas ocasiones no se limita a una traslación directa del texto a la viñeta, sino que añade de su propia cosecha, juega con las expectativas del espectador e incluso llega a complementar de tal forma el texto original que lo acaba superando por completo-, el hecho de que sea capaz de llevarse a su terreno un material original en forma de poema me fascina. Es el caso de Solo, donde además se introduce al típico personaje de la Warren que ejercía como presentador y que interpelaba al lector de manera directa -también lo despedía y en ocasiones se permitía el lujo muchas veces de interrumpirlo con algún comentario irónico-. En esta ocasión se trata de una anciana encapuchada tuerta de un ojo. 

Para La ciudad en el mar, de final sorprendente e impactante, Corben solo hace uso de las primeras y de las últimas estrofas, mientras narra en el medio la llegada de un náufrago a una isla misteriosa de pesadilla. Mientras que en La durmiente nos encontramos con una serie de asesinatos y una venganza llegada desde el más allá. El gusano vencedor es otra adaptación realmente original, dado el material de origen y cómo aprovecha las esencias teatrales del poema. Finalmente nos encontramos con el poema más famoso de Poe, El cuervo, al que Corben dota de un final mucho más impactante y sangriento. 

Página de El cuervo

La cita es un cuento de amor trágico que al estar ambientado en la ciudad de Venecia le da la oportunidad a Corben de lucirse en la ambientación. Berenice es la historia de una obsesión que ya en el momento en el que Poe lo publicó por primera vez llamó la atención por lo truculento de su trama y que ahora Corben adorna con un diseño de personajes no solo original, sino que suma a la hora de llenar de inquietud lo que se está contando. En su adaptación de Morella, sin embargo, opta por cambiar la trama de manera sutil en determinado punto del relato –la historia de un matrimonio en el que ella es aficionada a las artes oscuras y a la brujería-. En La sombra los protagonistas se enfrentan a un terror sin forma en un ambiente claustrofóbico y donde Corben, sin dar mayor detalle, nos traslada a un tiempo pasado gracias a los ropajes y el contexto donde se mueven los personajes. El hombre de la multitud es otro cuento breve de Poe al que Corben saca un inusitado partido dado la premisa de la que parte: un hombre se obsesiona con un extraño personaje al que decide perseguir por todo Londres. El entierro prematuro se aprovecha de un antiguo miedo de la época al que Poe, y por lo tanto Corben, han sacado mucho partido y que no es otro que el entierro en vida. Sorprende la cantidad de veces que ocurre esto bajo diferentes circunstancias, desde gente que queda catatónica por un extraño suceso a otros que son emparedados vivos. Junto con otros hechos que van repitiéndose, como el envenenamiento; o los seres sobrenaturales que traen la muerte a unos seres humanos que se encuentran en ese momento encerrados en algún sitio. Y la venganza, por supuesto, como ocurre en el sádico El barril de amontillado

Aunque es La caída de la casa Usher el relato estrella de esta antología, ya que Corben no solo echa el resto en el tablero de dibujo y en el guion a la hora de adaptar y sumar a una historia de sobra conocida, una de las más importantes que escribió Poe, sino que lo hace en 47 páginas, tomándose el tiempo necesario para crear la atmósfera en la que se desarrolla la trama –el resto tienen una duración variable, pero en general son de pocas páginas-. Un caso muy parecido es el de Los crímenes de la calle Morgue, un auténtico clásico de Poe, considerada como la primera narración de detectives de la literatura, al que Corben dedica una mayor cantidad de páginas. Para completar un trío de grandes historias del extraordinario cuentista, se adapta también La máscara de la muerte roja.

Portada para El entierro prematuro


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